Por Sin Reservas
Cientos de haitianos indocumentados han abarrotado la gobernación de esta provincia en busca de inscribirse en el Plan Nacional de Regularización de Extranjero puesto en marcha por el gobierno, cuyo plazo vence esta medianoche.
Ante el vencimiento del plazo para registrarse, los extranjeros provenientes en su mayoría de los bateyes cañeros amanecieron tirados en el suelo en las afueras en donde funciona la oficina habilitada para tales fines.
Es evidente que a muchos no les alcanzará el tiempo para lograr figurar en los listados de los que podrán quedarse en territorio dominicano, tras su regularización.
A los extranjeros que buscan regularizar su situación, no se les permite el acceso a los baños de las oficinas ubicadas en el lugar, lo que los obliga a realizar sus necesidades fisiológicas en bolsas plásticas, en rincones y esquinas de las calles, lo que ha afectado la higiene del entorno.
Pese a que miembros del Ejercito Dominicano y la Policía Nacional tratan de poner el orden, es notorio el caos reinante, y las largas filas dificultan el libre tránsito vehícular y a pie por las calles Luperón y Doctor Julio Abreu Cuello.
El plazo de inscripción vence hoy a la medianoche. El ministro de Interior, José Ramón Fadul, ha advertido que no habrá prórrogas, y el director de Migración, general Paulino Sem, ha dicho que está listo para llevar a cabo la repatriación de los ilegales en todo el país, muchos de los cuales han sido desnacionalizados.
Una transmisión de radio desde los Estados Unidos ha dicho que las autoridades haitianas preparan el recibimiento de los repatriados y deportados, y que para ello cuentan con personal que habla español, en el entendido de que muchos de los que llegaran a su territorio no hablan el creole.
Cortesía de: Luis Santamaría, ld.santamaria52@gmail.com